Por Flavia Tomaello, https://flaviatomaello.blog/, Instagram @flavia.tomaello
Un poquito de aquí y otro de allá. Las ganas de degustar como si se tratara de tapas se abre también al fin de la comida. Finde invita a divertirse con los tramos más dulces, aunque se excede y sus opciones cumplen más de un objetivo.
Hay una pintoresca pincelada pastel que cobra vida en la esquina. Por un sitio la puerta de vidrio, por otro el jardín frontal repleto de mesas tranquilas que duermen la siesta a cualquier hora esperando quien las cubra.
Los rincones de disfrute suben hasta un nivel apto para acercarse al cielo y ver desde allí el sol que entra por todas las ventanas. Un toque art decó, otro poco new romantic, algo más de minimalista posmoderno, todo con armonía serena que invita a pasarlo bien con alegría calma. Lo que apasiona allí son los dulces. Hay una esmerada composición de una carta de helados correctamente acotada y fuertemente construida en sabor y originalidad.
La cafetería es un hallazgo que convoca a hacerse un rato para degustar un café interesante, sabroso y que se convierte en adicción.
La gran sorpresa es el brunch, con presentaciones precisas, no numerosas, pero sí variadas para gustos diveresos.
Que sea domingo en cualquier momento
El brunch es la gran tendencia del finde relajado, cuando el tiempo huelga y a nadie le preocupa el reloj. Aquél del momento donde todas las comidas parecen reunirse en una aletargado momento de charla, dejarse estar en la sobremesa y picotear salado y dulce sin orden establecido.
Finde (con mayúsculas) vuelca su sabiduría en el resto de la semana y a cualquier hora para que
sin restricción horaria el domingo se vuelva brunch interminable. Croque Monsieur, Tostón de hummus, con pepino, tomate, queso de cabra y rúcula, Avocado Toast, Bowl de yogourt con granola– y algunas propuestas de pastelería como cookies, brownies, alfajores y medialunas, acompañado de café de especialidad de Puerto Blest, con la posibilidad de pedirlo con leche de almendras.
Gabriela Spanier es la joven emprendedora detrás de este proyecto, su sueño siempre fue un lugar a comer solamente postres. , Finde es una heladería canchera y original. La idea de Gabriela es que la gente pueda ir a Finde a tomar un helado o comer un postre y a la vez logre relajarse en un local de estética joven que reversiona la clásica heladería de barrio que invita a quedarse un buen rato, un café de especialidad realizado por baristas, y una propuesta de brunch y desayunos que se disfruta durante todo el día.
Espíritu de finde, aunque sea lunes…