24/08/2006 - Buenos Aires - Un centenar de vecinos de Gualeguaychú protestaron por la construcción de las plantas de la española Ence y la finlandesa Botinia. Con pancartas y algunos de ellos ataviados con los trajes típicos de los países a los que dirigen sus críticas, los asambleístas dejaron en cada representación diplomática una carta en la que expresan su rechazo a los dos proyectos industriales que consideran altamente contaminantes.
"En la Embajada de Uruguay no nos dejaron pasar, pero dejamos la carta. En cambio, en la de Finlandia y la UE fuimos muy bien recibidos, los funcionarios nos escucharon y en el caso de la UE se comprometieron a hacer saber a los 25 cuál es nuestra lucha", dijo a Efe la secretaria de la Asamblea, Marta Gorosperrazú.
La dirigente explicó que no marcharon hasta la Embajada de España porque hacerlo implicaba "alterar demasiado el recorrido", puesto que esa sede diplomática se encuentra alejada de las otras tres.
En tanto, los asambleístas marchaban esta tarde hacia las oficinas de la empresa finlandesa Nokia en el barrio porteño de Puerto Madero.
"También vamos a dejarle nuestro mensaje. Nokia es una empresa muy comprometida con el medio ambiente y queremos que se solidaricen con nuestra causa", explicó Gorosperrazú.
El caso por las papeleras se trasladará la semana próxima a Finlandia, hacia donde viajará una delegación de la organización no gubernamental Centro de Derechos Humanos y Ambiente (CEDHA) y de la Asamblea de Gualeguaychú para entrevistarse con miembros del Gobierno finlandés.
La construcción de las plantas generó una controversia entre Argentina y Uruguay, que se dirime en la Corte Internacional de Justicia de La Haya.
Los vecinos de Gualeguaychú protagonizaron a principios de esta año varios bloqueos en dos de los tres pasos fronterizos entre Argentina y Uruguay, por los que este último país recurrió al Tribunal Arbitral del Mercosur, bloque también integrado por Brasil, Paraguay y Venezuela. EFE