12/10/2006 - Washington - El estudio afirma que las papeleras usarán la tecnología más avanzada para evitar contaminación y aplicarán las normas de respeto al medio ambiente vigentes en Europa y Norteamérica.
Ese veredicto positivo hace más probable que el Banco Mundial dé el visto bueno al desembolso de préstamos por un valor máximo de 720 millones de dólares para los proyectos.
La decisión deben tomarla los consejos directivos de la Corporación Financiera Internacional (IFC, en inglés) y la Agencia Multilateral de Garantía de Inversiones (MIGA), que forman parte del Grupo del Banco Mundial.
Ese organismo indicó en un comunicado que las gerencias de ambas entidades decidirán "en breve" si presentan al proyecto a sus directorios. Una fuente de la IFC afirmó que la decisión se tomará "en un par de días".
Si deciden enviarle el proyecto a los consejos, estos órganos tendrán 30 días para deliberar y analizar los documentos, después de lo cual se podrán reunir en cualquier momento para decidir si aprueban o no los créditos, de acuerdo con la fuente.
El tema ha provocado una gran discordia entre Argentina y Uruguay. Defensores del medio ambiente argentinos han anunciado que bloquearán entre mañana y el domingo el puente que comunica a la ciudad argentina de Gualeguaychú con la uruguaya Fray Bentos en protesta.
Por su parte, Uruguay defiende la construcción de las plantas por parte de la empresa finlandesa Botnia y la española Ence, que significará la mayor inyección de capital extranjero en su historia, pues costarán en total 1.860 millones de dólares.
En esta pugna se ha visto envuelto el Banco Mundial, ya que ambas compañías le han solicitado préstamos y garantías de crédito.
Botnia ha pedido a la IFC 170 millones de dólares y Ence, "un máximo" de 250 millones, según el organismo, mientras que Botnia ha solicitado garantías de crédito a MIGA por "un máximo" de 300 millones.
Ence anunció el 21 de septiembre que había detenido las obras en Fray Bentos y trasladaría la planta a otro lugar de Uruguay, que no ha determinado.
Botnia, por su parte, sigue con sus planes e indicó tras la decisión de Ence que ya ha construido el 60 por ciento de su planta en esa ciudad y que ha empezado a instalar la maquinaria.
El estudio divulgado hoy confirma las conclusiones del análisis preliminar publicado por el Banco Mundial en diciembre del año pasado, que afirmó que el proyecto cumple los "requisitos técnicos" del organismo y no empeorará la calidad del agua o del aire de forma significativa.
El informe final especifica que las plantas emitirán el mismo volumen de gases o menos que las papeleras que usan los últimos adelantos tecnológicos en Brasil y otros países, y que los planes de Botnia y Ence para el tratamiento de desechos se ajustan a las normas más avanzadas.
Por ello, concluye que sus proyectos "serían aceptados en Canadá, Estados Unidos o Europa". "Tendrán un desempeño mejor respecto al medio ambiente que cualquiera de las plantas de celulosa de las compañías", añade.
El estudio deja claros los beneficios económicos para Uruguay, pues calcula que hasta el año que viene la construcción de las plantas generará unos 18.700 empleos directos e indirectos, y unos 12.600 posteriormente.
Anualmente el impacto económico de sus actividades será de 331 millones de dólares, lo que equivale al 2,5 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) de Uruguay.
Para la ciudad de Gualeguaychú también podría tener ventajas económicas, en forma de nuevos empleos en empresas de prestación de servicios y ventas de madera a las papeleras, pero sólo si cambia la actitud de oposición al proyecto del Gobierno argentino y de la propia ciudad, alerta el documento.
Tanto el estudio publicado hoy como el de diciembre fueron realizados por consultores externos al Banco Mundial.
El análisis final tiene en cuenta la información aportada por las partes interesadas desde diciembre, incluida la recabada en dos sesiones de comentarios públicos que se celebraron en Buenos Aires y Montevideo.
Botnia, por su parte, celebró hoy en Uruguay la conclusión del informe.
Un comunicado de Botnia, entregado a Efe por la empresa en Montevideo, confirmó además que ha solicitado al Banco Mundial un crédito para la construcción de su planta de celulosa en Fray Bentos, al tiempo que anunció un estudio positivo para las plantas.EFE