18/10/2006 - Buenos Aires - Ramiro González, de 28 años, dijo haber sido víctima de este hecho al cumplirse hoy un mes de la desaparición de Jorge Julio López, testigo clave en el juicio contra un represor del régimen que gobernó el país de 1976 a 1983.
"Me gritaron que nos dejáramos de joder o nos van a matar", señaló González luego de relatar que esta madrugada cuatro hombres armados le obligaron a subir a un automóvil y le dejaron en libertad una hora y media después.
El joven es uno de los miembros de la agrupación Hijos que asistieron al juicio contra el ex policía Miguel Etchecolatz, quien fue condenado a reclusión perpetua por "genocidio" a partir del testimonio de López y otras víctimas de la "guerra sucia".
"Me mostraban fotos de chicos y querían que los reconociera como militantes de la agrupación" Hijos, agregó González, quien recalcó que sus captores también lo golpearon y le amenazaron de muerte.
Desde la desaparición del testigo López, de 77 años, se ha registrado una oleada de amenazas contra jueces y fiscales que investigan violaciones de los derechos humanos cometidas durante la dictadura.
El paradero del septuagenario se desconoce desde el 18 de septiembre último y los operativos de búsqueda realizados por las fuerzas de seguridad han resultado infructuosos, por lo que se teme que haya sido víctima de un secuestro.
Agrupaciones humanitarias, sociales y estudiantiles, sindicatos y fuerzas políticas realizarán hoy una nueva manifestación por las calles de Buenos Aires para exigir la "aparición con vida" de López, tal como lo hacían los familiares de víctimas en plena dictadura. EFE
