25/10/2006 - Buenos Aires - En un detallado y extenso dictamen, la unidad de fiscales creada especialmente para investigar nuevamente el ataque terrorista solicitó al juez encargado del caso que ordene la captura de ocho iraníes, entre ellos el ex presidente Alí Akbar Hashemi Rafsanjani.
La fiscalía apuntó directamente a Irán y Hizbulá tras el rotundo fracaso de casi una década de investigación dirigida por el magistrado Juan José Galeano, quien fue destituido el año pasado en medio de denuncias sobre graves irregularidades en el expediente.
La voladura de la sede de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) "fue una decisión tomada por las más altas autoridades del Gobierno de Irán", que "le encomendaron" a Hizbulá "la organización" del atentado, afirmó hoy el fiscal Alberto Nisman.
En rueda de prensa, anunció que por ese motivo pidió al juez que investiga el caso, Rodolfo Canicoba Corral, la captura del ex presidente de Irán y de los ex ministros de Relaciones Exteriores Alí Akbar Velayati y de Información y Seguridad Alí Fallahijan.
También la del ex comandante de la Guardia Revolucionaria Mohsen Rezai, el ex jefe del Servicio de Seguridad de Hizbulá Imad Fayez Moughnieh, el ex líder de las Fuerzas QUDS Ahmad Vahidi y la de dos antiguos funcionarios de la embajada de Irán en Buenos Aires, Moshen Rabbani y Ahmad Reza Ashgari o Mohsen Randjbaran.
"Estas son las primeras conclusiones de un año y medio de trabajo", dijo Nisman sobre el dictamen de 800 páginas en relación con el ataque perpetrado con un coche bomba el 18 de julio de 1994, que además de 85 muertos causó 151 heridos.
"La decisión de perpetrar el atentado fue tomada el 14 de agosto de 1993 en la ciudad iraní de Mashad, durante una reunión del llamado Comité de Asuntos Especiales, integrado por las más altas autoridades políticas y religiosas del régimen", dice el documento.
El dictamen, al que tuvo acceso Efe, también da por probado que Irán utilizó la misma "matriz terrorista" que en otros ataques perpetrados en Europa y que la embajada de Irán en Buenos Aires se convirtió en una "estación de inteligencia que preparó" el terreno para el atentado que convirtió en escombros la sede de la AMIA.
En ese sentido, Nisman señaló que meses antes del hecho hubo "importantes giros de dinero" a Rabbani y que los "grupos operativos" que concretaron el ataque "ingresaron en Argentina el 1 de julio de 1994 y se retiraron horas antes de la explosión".
Tal como había adelantado el fiscal en noviembre pasado, el dictamen dio por probado que el atentado fue "ejecutado" por Hizbulá y que el terrorista suicida que se inmoló en el edificio con un coche bomba era el libanés Ibrahim Hussein Berro.
La comunidad judía de Argentina, que es la más numerosa de Latinoamérica y había reclamado al Gobierno que rompa relaciones diplomáticas con Irán, elogió la tarea de los fiscales.
"El fallo es sólido y la prueba es contundente respecto de la responsabilidad de Irán y del Hezbollah como autores del atentado", evaluó el presidente de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas, Jorge Kirszenbaum.
Por su parte, la Asociación de Familiares y Amigos de las Víctimas del Atentado a la AMIA reclamó al juez Canicoba Corral que "analice y suscriba los pedidos de captura solicitados con urgencia y prontitud".
El de la mutualista fue el segundo ataque cometido contra objetivos judíos en Argentina, donde en 1992 la explosión de un coche bomba frente a la sede de la embajada de Israel en Buenos Aires causó 29 muertos y más de un centenar de heridos.
La Corte Suprema de Justicia deberá revisar el fallo que hace dos años absolvió por falta de pruebas a 22 argentinos, entre ellos varios ex policías, acusados de complicidad en el atentado contra la AMIA, al cabo de casi tres años de un juicio oral y público.
Además, en una causa paralela a la principal otro juez investiga irregularidades cometidas por Galeano, quien fue apartado del caso en el 2003 y destituido por "mal desempeño de sus funciones" en agosto del 2005. EFE