14/07/2007 - Buenos Aires - "El servicio está restablecido en un 70 por ciento y mañana lo estará en su totalidad", indicó hoy Raúl Castellano, presidente de la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines de la República Argentina (CECHA), que representa a unas 1.600 gasolineras en toda la nación.
El suministro estaba interrumpido desde el martes pasado, cuando el gobierno cortó la venta de gas natural comprimido para todos los automóviles y ordenó su sustitución a igual precio por naftas para taxis y fletes.
Debido a la medida, las estaciones de servicio se registraron largas filas de autos que cargaron nafta a precio de gas, mientras más de 7.000 taxis porteños no circularon durante los últimos tres días debido a su imposibilidad de cargar nafta por problemas técnicos.
Argentina vive desde mayo pasado una crisis de abastecimiento de gas que se explica por una creciente demanda del sector productivo y un pico de consumo en los domicilios por la persistente ola de frío que azota al país.
El secretario argentino de Comercio Interior, Guillermo Moreno, aseguró que la restitución del suministro es "por tiempo indeterminado", con lo que se espera que no vuelva a interrumpirse en estos días.
De todas formas, la crisis energética, advertida por empresarios y no reconocida por el gobierno, afecta a diversos sectores como el agropecuario, que afronta la escasez de gasóleo en las provincias del interior del país, según asegura un informe de la Sociedad Rural Argentina.
El estudio señala que en 42 de 47 localidades relevadas se detectó la falta de este combustible, utilizado para desarrollar su actividad.
A tono, un informe del Instituto de Estudios Económicos de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires afirma que "de continuar la caída en la producción de fertilizantes nitrogenados -a raíz de la falta de energía- ocasionaría una reducción en el rinde de la campaña agrícola 2007/8 con mermas estimadas en 270 millones de dólares".
Con el objetivo de contrarrestar la escasez energética, el gobierno argentino acordó el pasado jueves con las principales petroleras que operan en el país un plan que permitirá a las industrias sustituir el gas por combustibles líquidos al mismo valor. EFE