Nueva ola de ajustes: El Gobierno evalúa recortar horas extras y adicionales en la Administración Pública

En un contexto de ajustes, el gobierno argentino está considerando una nueva medida que podría impactar directamente en los trabajadores de la administración pública: la reducción de horas extra y otros adicionales. Esta medida se suma a la reciente cancelación de contratos de empleados que se sumaron en 2023, así como la revisión de aquellos con antigüedad y que no forman parte de la planta permanente, llevando la tensión con los gremios a un nuevo nivel.

La auditoría realizada en el marco del decreto 84, utilizado para dar de baja los contratos del año pasado, señala que muchos de estos trabajadores perciben sueldos alrededor de los $450 mil, siendo la mitad de esa cifra representada por horas extra y otros conceptos adicionales. Desde el área de Empleo Público de jefatura de Gabinete se evalúan estos contratos, y existe la preocupación de que se apliquen recortes o topes en el pago de horas extras y suplementos, situando los ingresos por debajo de la línea de la pobreza, especialmente en un contexto de alta inflación.

Esta medida, en conjunto con la cancelación de contratos, ha generado protestas por parte de los gremios, anticipando un paro general decretado para el 24 de este mes. ATE, por ejemplo, ya ha llevado a cabo acciones de protesta contra estas medidas.

Se espera que la conflictividad aumente, ya que este nuevo recorte podría dejar los salarios en alrededor de los 225 mil pesos, en medio de una inflación que podría alcanzar el 30% en diciembre. Esta combinación anticipa una fuerte pérdida del poder adquisitivo de los trabajadores estatales, lo que podría intensificar las tensiones y la resistencia sindical ante las medidas de ajuste del gobierno.